7. FinCenFiles

La plata también está en espacios físicos. O debería, para tributar impuestos. Pero no es lo que surge de los FinCenFiles, los documentos que difundieron esta semana  Buzzfeed y el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación, filtrados de la Financial Crimes Enforcement Network, la agencia de Estados Unidos contra el lavado de dinero, la corrupción y el financiamiento del terrorismo. Exponen 2600 “informes de actividad sospechosa” de empresas, gobiernos y figuras públicas. El banco con más reportes es, por lejos, Deutsche Bank, que acaparó más de un tercio (¡982!) y dos tercios del dinero sucio circulante. Lo siguen muchos; nadie está para tirar la primera piedra. Las transacciones, por más de 2 billones de dólares, financiaron desde el cartel de Sinaloa hasta la guerrilla pro-rusa en Ucrania vía paraísos fiscales (“paraísos” para quienes evaden millones; para el resto, infiernos). Putin, Peña Nieto, Odebrecht, Vicentin y Marcelo Tinelli aparecen en los informes; Argentina se menciona en 237 documentos, según Perfil. 

Durante la pandemia, la gente rica se hizo más rica y la pobre, más pobre. Como siempre, pero más rápido. En Estados Unidos, 643 multimillonaries aumentaron su fortuna un 29 por ciento y pasaron a concentrar el 32 por ciento de la riqueza, según Institute for Policy Studies; Jeff Bezos, Bill Gates, Mark Zuckerberg y Elon Musk encabezan la lista. En Argentina, en el último trimestre la brecha también se amplió: el 10 por ciento más rico gana 25 veces más que el 10 más pobre, afirma Infobae sobre el último informe del INDEC. Ayer logró dictamen en Diputados el proyecto de Aporte Solidario Extraordinario de las Grandes Fortunas, que afectaría a 9298 personas que tienen más de 200 millones de pesos; se prevé que la mitad de la recaudación venga de las 625 con más de 1500 millones.
Oxfam asegura que durante los últimos 25 años, el 1 por ciento más rico de la humanidad contaminó más que el doble que la mitad más pobre en emisiones de carbono.